Me conozco su voz, en formato susurro, en formato gemido y en formato secreto.
Todo eso de que los besos de ciertas bocas saben mejor es un cuento que me sé desde el día que me dio dos besos y me dijo su nombre.Que me sé sus cicatrices, y el sitio que la tienes que tocar en el este de su pie izquierdo para conseguir que se ría, y me sé lo de sus rodillas, y la forma que rozar las cuerdas de una guitarra.
Que yo también he memorizado su número de teléfono, pero también el numero de sus escalones, y el numero de veces que afina las cuerdas antes de ahorcarse por bulerías.
Que no sólo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores, y yo sí que no tengo cojones a decirle que no a nada, porque tengo más deudas con su espalda de las que nadie tendrá jamás con la luna
'Esto es un trozo de mi vida, pero habrá más, porque lo bueno, viene en pequeñas dosis.'
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